El mundo cambia y los hábitos de compra, también. En los tiempos que corren y gracias al internet podemos vender nuestros productos y servicios en todo el mundo sin necesidad de tener un montón de sucursales de nuestra tienda en distintas ciudades. Tener una tienda online se ha vuelto prácticamente imprescindible si queremos que nuestra marca se expanda, gane renombre y se aumenten las ventas y cada vez es más frecuente escuchar hablar de desarrollo web y de diseño de tiendas online.
Pero crear una tienda online no es suficiente para conseguir todo eso, es necesario contar con una estrategia de marketing digital diseñada de acuerdo a las necesidades de la marca y sus objetivos a corto, medio y largo plazo. Crear páginas web es un trabajo mucho más complejo de lo que parece que, de hacerse de forma incorrecta, nos puede generar pérdidas económicas importantes y si bien las agencias de diseño web Vigo no siempre tienen una fórmula exacta que funcione con todas las marcas, hay ciertos errores que deben evitarse en el diseño web profesional y en la gestión profesional de tiendas online para conseguir una tienda online funcional que genere grandes beneficios:
- Elección incorrecta de imágenes. Las imágenes que aparecen en nuestra página web pueden ser el factor que marque la diferencia entre una tienda online exitosa y una que ahuyente a los clientes. Las imágenes de mala calidad, con poca iluminación, muy pequeñas o muy poco nítidas no transmiten confianza al usuario. Es importante tener en cuenta que, cuando se compra por internet, el cliente no puede tocar el producto ni verlo de cerca, por lo que una selección de varias fotografías de buena calidad puede funcionar como un empujoncito para ganarnos su confianza. Las imágenes deben mostrar todos los ángulos del producto y exponer hasta los detalles más pequeños.
- Falta de información. Una de las principales preocupaciones a la hora de comprar online es si la página que estamos viendo es fiable. Para evitar dichas dudas es muy útil contar con apartados con información de contacto, como el número de teléfono, el correo electrónico y la dirección de nuestra tienda física. También es recomendable dejar enlaces a las redes sociales de la marca.
- Difícil acceso a la información. Se dice que un buen proceso de compra debería poder realizarse en tres clics, pero se trata de algo un poco más complejo. La idea va más allá de exigir un número máximo de clics, sino de que dichos clics sean productivos. Si el cliente tiene que dar demasiados pasos para encontrar un producto, lo más probable es que abandone la página y pase a la próxima tienda online que ofrezca lo mismo. Cada clic que el cliente haga en nuestra tienda debe tener un propósito y ser útil, por lo que mientras menos pasos y complicaciones innecesarias, mejor.
- Proceso de pago confuso. El cliente no quiere llenar formularios excesivamente largos antes de realizar la compra. Nuevamente, mientras más sencillo sea el proceso, más posibilidades hay de cerrar la venta. El proceso de compra debe ser simple y comprensible, por lo que se recomienda pedir solo la información necesaria. También es recomendable que, una vez realizado el pago, aparezca en la pantalla una confirmación que deje claro que todo salió bien.
Es importante ofrecer una buena experiencia de usuario para que el cliente se sienta cómodo y seguro mientras realiza la compra, esto se consigue con una página web cómoda, rápida, sencilla y accesible que ofrezca toda la información que el comprador pueda necesitar. Cuando hablamos del diseño de tiendas online es imprescindible tener en cuenta al target a lo largo de todo el proceso para que nuestra plataforma se convierta en esa herramienta infalible que multiplique el valor de la marca.